Todos los precandidatos a la presidencia del Pacto Histórico cuentan con méritos y capacidades para ser eventualmente la fórmula vicepresidencial del probable candidato presidencial Gustavo Petro. Sin embargo, ante la necesidad del Pacto Histórico de forjar la más amplia convergencia nacional para poder ganar las próximas elecciones presidenciales, compartir la fórmula vicepresidencial con una figura progresista independiente o incluso proveniente de las filas de la Coalición de la Esperanza o del liberalismo, podría hacer la diferencia entre llegar o no a la Casa de Nariño.
Tomado de Revista Sur
https://www.sur.org.co/cual-formula-vicepresidencial-para-el-pacto-historico/
Por Mauricio Trujillo Uribe
Enero de 2022
El movimiento Soy porque Somos, en asamblea realizada el pasado 15 de enero, tomó la decisión de permanecer en la coalición Pacto Histórico, luego de los cuestionamientos de la precandidata presidencial de ese movimiento, Francia Márquez, en razón de que se incumplieron los compromisos en la conformación de la lista cerrada para el Senado que la coalición presentará en las próximas elecciones del 13 de marzo.
Márquez había rechazado que el componente afro y de diversidad étnica no estuviese dentro de los 20 primeros renglones de la lista. También había manifestado su inconformidad porque se le dio el puesto 11 al candidato del movimiento Independientes de Medellín, aliado del alcalde Quintero. El líder de la Colombia Humana, Gustavo Petro, estuvo de acuerdo con su primer reclamo y llamó al colegio electoral del Pacto Histórico a modificar la lista, lo cual finalmente no se logró.
Soy porque Somos encarna los intereses de los pueblos étnicos. Su nombre concuerda con el de la serie de documentales transmitida por Telepacífico en febrero de 2021 sobre la etnicidad africana en el Pacífico y otras regiones de Colombia. “Sus rasgos culturales, prácticas ancestrales, formas de vivir en comunidad, luchas por sus derechos y hasta su forma de adaptarse a los desafíos de un mundo globalizado e hipercomunicado, es lo que nos van a contar estas voces, como un reflejo de sus raíces y de su territorio”, decía el anuncio de la serie.
La lideresa afro lanzó su candidatura en Santander de Quilichao, población del Cauca de cien mil habitantes afros, indígenas y mestizos, en julio del año pasado, y cuenta con el aval del Movimiento de Autoridades Indígenas de Colombia y el Polo Democrático debido a las dificultades que tuvo en la recolección de firmas.
Considerando que el Pacto Histórico recoge las aspiraciones de Soy porque Somos, y que la posibilidad de que llegue a gobernar depende de que logre convocar una amplia convergencia nacional en las próximas elecciones presidenciales, no hubiese sido coherente que los reparos a la lista al Senado y demás críticas, hubiesen terminado primando en el seno de ese movimiento por la dignidad, más allá de que el malestar expresado por algunos de sus líderes tenga justificación.
Como tampoco sería coherente que luego de las elecciones para el Congreso, Soy porque Somos pusiese como condición para continuar en el Pacto Histórico que Francia Márquez fuese la fórmula vicepresidencial de Gustavo Petro en el caso de que éste ganase la consulta ciudadana para elegir el candidato presidencial de la coalición y, a su vez, la lideresa afro consiguiese la segunda votación, como parecen indicar algunos sondeos recientes.
Desde luego, todos los precandidatos a la presidencia del Pacto Histórico tienen propuestas válidas para el país y cuentan con méritos y capacidades para ser eventualmente la fórmula vicepresidencial del probable candidato presidencial Gustavo Petro. Y si el número de votos de quien llegue en segundo lugar en la consulta resultase numéricamente significativo, lo normal y pertinente sería considerar su postulación como candidato a la vicepresidencia en nombre de la coalición.
Sin embargo, debe tenerse en cuenta otro elemento clave de una estrategia con vocación de poder: ante la necesidad del Pacto Histórico de forjar la más amplia convergencia nacional para poder ganar las próximas elecciones presidenciales, tanto más si se pretende triunfar desde la primera vuelta el 29 de mayo, compartir la fórmula vicepresidencial con una figura progresista independiente o incluso proveniente de las filas de la Coalición de la Esperanza o del liberalismo, podría hacer la diferencia entre llegar o no a la Casa de Nariño.
El Pacto Histórico, como alianza de partidos y movimientos sociales de izquierda y alternativos, requiere concitar el respaldo de sectores no alineados y también de centro, e incluso de ciudadanos de otras orillas que no desean ver al uribismo de vuelta, si quiere tener una real oportunidad de acceder al poder en este cuarto de hora favorable al cambio. Petro deberá actuar en consecuencia aunque ello no sea bien comprendido por algunos militantes y adherentes de la coalición. En este sentido, la acertada escogencia de la fórmula vicepresidencial será un factor decisivo.
